lunes, 24 de diciembre de 2012

Inmobilizado

La sensación de inmobilidad que siento aquí ahora mismo es totalmente proporcional a la que sentía hace unos meses en el extranjero. Lo intento día a día, pero me siento agarrotado e insensible, la definición exacta sería zombie. Da pena que la única forma de ser feliz sea alejarse de los que más quieres. Pero una vez emprendí un viaje del que creo que nunca he vuelto y eso no es justo para nadie, ni para mí ni para los demás; debo encontrar mi sitio y quien sabe si así algún día podré volver en cuerpo y alma.